5 consejos para combatir la soledad en la vejez
Con la edad, se produce una mayor separación intergeneracional. La persona mayor no comparte gustos ni formas de comunicación con las generaciones más jóvenes, lo que le lleva a sentirse diferente y muchas veces excluido. Los déficits sensoriales como la pérdida de oído o de la vista, dificultan la comunicación y, por tanto, las relaciones.
Aunque a veces puedes buscar estar solo, si la sensación de soledad se convierte en crónica en el tiempo, puede repercutir negativamente en tu salud.
Durante la vejez, participa en asociaciones. Las hay muy diversas: sobre cultura, ocio y actividades recreativas, solidaridad o formación. También muchos adultos mayores con experiencia en distintos ámbitos se organizan y proporcionan asesoramiento de forma voluntaria a personas más jóvenes que están iniciando su vida laboral.
Igualmente, puedes participar en acciones de voluntariado y encuentros intergeneracionales para aportarle valor con tu experiencia y experiencia.
Conviene que cultive las relaciones con vecinos, amigos y familia.
Dedica tiempo a realizar actividades estimulantes física e intelectualmente: mantenerse activo en cuerpo y mente es una forma saludable de vivir la vejez.
Valora la posibilidad de acudir a los centros de educación de adultos y universidades para personas mayores.
Aprende nuevas tecnologías, puesto que, aunque a menudo suponen un reto, propician nuevas formas de comunicación y adquisición de conocimientos y son especialmente útiles.
Si quieres más información, consulta a tu enfermera.