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El hecho de marcarnos demasiado nuevos propósitos o grandes expectativas para el nuevo año que comienza, son algunos de los factores que pueden llevar a situaciones de ansiedad e incluso ponernos agresivos. Te proponemos tres maneras de combatir y vencer la ansiedad:

1. Hacer ejercicio físico
   
   El ejercicio habitual contribuye a mejorar la condición física de manera importante, además hace que segreguemos endorfinas, unas sustancias que contribuyen a nuestra sensación de bienestar general. Todo esto ayuda a mantenernos positivos y con las fuerzas para reaccionar ante estímulos potencialmente agresivos o perjudiciales.
   
   Además, la buena condición física tiene efectos psicológicos beneficiosos, porque permite mejorar el estado de ánimo, disminuye la depresión y aumenta el vigor y la autoestima.
   
   En este sentido, hacer ejercicio promueve el estado emocional positivo, lo que aumenta el bienestar psicológico. No se trata tampoco de hacer un ejercicio extenuante, una actividad física moderada como pasear puede ayudarnos a controlar mejor la ansiedad. Otra posibilidad es hacer marcha nórdica, un deporte que además de ser suave tiene muchos beneficios que os relacionamos en esta infografía.
   
   
2. Controlar la respiración
   
   Tomar conciencia de la respiración o hacer ejercicios de control sobre la frecuencia respiratoria contribuye a bajar nuestro nivel de activación (ritmo cardíaco, movimientos, etc.) y puede ayudarnos mucho a paliar situaciones de angustia o ansiedad.
   
   También nos ayuda a controlar y soportar mejor el dolor, si tenemos, y por lo tanto hacer que estemos menos irritables. En este vídeo te mostramos tres ejercicios muy sencillos para ejercitar la respiración.
   
   
3. Expresar tus emociones, pero con cuidado 
   
   Manifestar tus emociones es bueno mientras esta manifestación no te ancle en una manifestación repetitiva de miedo, rabia o culpa. Si esto ocurre, puede impedir que encuentres la perspectiva necesaria para salir de esta situación que te angustia.
   
   En este sentido, tener una red de apoyo de personas cercanas que te ayuden a sentirte comprendido y no juzgado es clave para hacer que la expresión de emociones resulte útil y superar la angustia.